Revista Cubana de Salud y Trabajo (May 2021)
Fundador de la Psicología Laboral en Cuba
Abstract
Nunca pudimos imaginar que el escribir una página se tornara tan difícil, agobiante. Pero es que se trataba de hacerlo comentando otra partida física, siempre inesperada, siempre dolorosa. Se nos ha ido, este 22 de marzo, Pedro, Almirall, el profesor, el científico, el orador, el autor, el directivo, el consejero, el oportunamente crítico, el amigo, el familiar. Y es que todos, en Cuba y en una buena parte del mundo, en América, porque no fue solo en América Latina, lo conocieron, aprendieron de él, lo respetaron y lo admiraron. Nació un día que posteriormente se convertiría en una fecha gloriosa: un 26 de julio, en el año 1949. En su niñez y juventud recibió de sus padres una educación que lo hizo honrarlos y respetarlos mientras los tuvo en vida, y posteriormente, en el caso de la madre muy recientemente, apenas dos meses atrás. Psicólogo, en toda la extensión de la palabra, estamos seguros de que mucho antes de su graduación en 1974, en la entonces Escuela de Psicología de la Facultad de Ciencias de la Universidad de La Habana. Su extensa y diversa producción científica, en Cuba y en el extranjero, alcanzó y sobrepasó el centenar de contribuciones, tanto publicaciones como actividades docentes; dirigió y participó en más de 40 proyectos de investigación, muchos de ellos asociados a programas ramales y nacionales, y fue prolífico ponente en eventos científicos. Su presencia constante le otorgó un sello distintivo a las actividades institucionales: Forum de Ciencia y Técnica, jornadas por aniversarios, simposios y congresos. Imposible que no olvidemos señalar algo destacado y ejemplar que haya hecho; igual de imposible resultará que su ejemplo y recuerdo no permanezcan entre nosotros; Almirall, Pedro, llegó, estableció y deja un legado: fue quien introdujo en Cuba, para que quedara para siempre, la Psicología dentro de la Salud Ocupacional.