Revista Espanola de Enfermedades Digestivas (Jan 2006)
Outpatient laparoscopic cholecystectomy: A new gold standard for cholecystectomy? Colecistectomía laparoscópica ambulatoria: ¿El nuevo "gold standard" de la colecistectomía?
Abstract
Objective: to contribute our experience for five years in the implemetation of outpatient laparoscopic cholecystectomy (LC). Patients: between January 1999 and March 2004 we performed 504 outpatient LCs. We applied both exclusion and inclusion criteria, an anesthetic and surgical protocol, and discharge-specific criteria. Postoperative management in "fast track" regime. Postoperative period controlled by protocol, including phone calls after cholecystectomy. Results: the ambulatory percentage in the global series was 88.8%, and mean hospital stay was 6.1 hours. Fifty-one patients required overnight stays (10.1%), most of them for "social" causes. Five patients required admission (between 24 and 48 hours) for different causes (conversion to laparotomy, intraoperative neumothorax, and postoperative medical complications). Six patients (1.1%) were readmitted, and we observed 11.6% postoperative complications in the global series, with abdominal parietal pain being most frequent. Phone localization by 22.00 p.m. in the same day of surgery was 100% complete for outpatient cases. Postoperative surveillance within the first month after surgery was completed in 93.9%, and within th first year in 86.7% of patients. Conclusions: outpatient LC is safe and feasible, and probably represents a new "gold standard" in the treatment of symptomatic cholelithiasis.Objetivo: aportar nuestra experiencia durante cinco años en la implantación de la colecistectomía laparoscópica (CL) en un programa de cirugía mayor ambulatoria (CMA). Pacientes: entre enero de 1999 y marzo de 2004, se realizaron 504 CL consecutivas en régimen ambulatorio. Se aplicaron criterios de exclusión e inclusión, un procedimiento anestésico-quirurgico protocolizado, y criterios específicos al alta hospitalaria. El manejo postoperatorio se realizó en régimen de "fast track" o de recuperación rápida. Seguimiento postoperatorio estricto mediante protocolo de revisiones, incluido localización telefónica el día de la colecistectomía. Resultados: el índice de sustitución de la serie global fue 88,8%, siendo la estancia hospitalaria media de este grupo de 6,1 horas. Cincuenta y un pacientes requirieron estancia nocturna en el hospital (10,1%), la mayoría por causas de índole "social". Cinco pacientes requirieron ingreso (entre 24 y 48 horas) por diferentes causas (conversión a cirugía abierta, neumotórax intraoperatorio, y complicaciones médicas postoperatorias). Seis pacientes (1,1%) fueron reingresados en nuestra clínica y se observó un 11,6% de complicaciones postoperatorias en la serie global, donde el dolor abdominal de tipo parietal fue la más frecuente. El contacto obligatorio telefónico a las 22,00 horas del mismo día de la cirugía se cumplió en el 100% de los casos ambulatorios. El seguimiento postoperatorio al mes de la intervención fue del 93,9% y al año, del 86,7% de los pacientes. Conclusiones: la CL en régimen ambulatorio se puede realizar de manera segura y fiable, y probablemente representa el nuevo "gold standard" del tratamiento de la colelitiasis sintomática.