Revista Finlay (Jan 2017)
Tejido adiposo como glándula endocrina. Implicaciones fisiopatológicas.
Abstract
El tejido adiposo se considera en la actualidad como un órgano con importante función endocrina; distinguiéndose dos tipos: el pardo y el blanco. El tejido adiposo es capaz de secretar diversas sustancias conocidas como adipocinas que se encuentran implicadas en la regulación del peso corporal, en el sistema inmune, en la función vascular y en la sensibilidad insulínica. En la obesidad, principalmente visceral, se encuentran aumentadas las adipocinas proinflamatorias. Estas se asocian a la inflamación clínica y subclínica, a la insulinorresistencia, al estrés oxidativo y a la lesión endotelial; desarrollan un papel clave en el síndrome metabólico e incrementan el riesgo cardiometabólico. El objetivo de la presente revisión bibliográfica ha sido exponer las características morfofuncionales del tejido adiposo y los mecanismos que lo vinculan con la génesis de diversas enfermedades.