Álabe (Jun 2011)
Intentando leer el Caribe
Abstract
La primera sorpresa al releer a Alejo Carpentier se nos ofrece sin duda como la clave de cualquier escritura novelística: quiero decir, hasta qué punto Carpentier es capaz de “suspender nuestra incredulidad”, como indicaba Coleridge. De ahí la sorpresa: hoy es difícil leer novelas y mucho más creérnoslas. Afortunadamente Carpentier escribió en un momento en que aún se creía en la Literatura (precisamente casi el último o mejor momento), en que aún se creía en ese milagro de contar historias cotidianas como si fueran “maravillas”.