Revista Colombiana de Obstetricia y Ginecología (Dec 2007)

Conflicto de intereses Conflict of interest

  • Santiago Barrios-Vásquez

Journal volume & issue
Vol. 58, no. 4
pp. 296 – 303

Abstract

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La condición humana, en particular el narcisismo normal del adulto, favorece que clínicos, investigadores, miembros de comités de investigación, de asesores y de bioética, así como pares, editores y los industriales del sector de la salud, sean proclives a la seducción de la fama y la fortuna. Entonces siempre existe la posibilidad del conflicto de intereses, ora en la consulta, ora en los ensayos clínicos, que además sesgarán metaanálisis, protocolos, editoriales y revisiones de la literatura. El conflicto en sí no es reprobable, la dificultad surge cuando otras motivaciones prevalecen por encima de los intereses de beneficiar al paciente y de construir el mejor conocimiento posible. Esta situación, aunada con las dificultades propias de la búsqueda de la verdad científica, entorpece aún más. Sin embargo, la implementación de metodologías de investigación adecuadas, la medicina basada en la evidencia, el desarrollo de criterios para evaluar la calidad de los protocolos, las políticas de los comités y las revistas para declarar y explicar rivalidades entre intereses, así como la educación y la discusión abierta, han sido grandes avances en el manejo de estas dificultades. El objetivo de esta revisión es reflexionar sobre estos mecanismos que buscan proteger la confianza de los consumidores de literatura científica, dando la posibilidad al lector de formar conceptos más libres y sinceros sobre la información que está recibiendo. En conclusión, la confiabilidad de los materiales científicos de la medicina es una responsabilidad colectiva.Human nature, especially narcissism, makes clinicians, researchers, review board members, peers, editors and health care entrepreneurs vulnerable to the allure of fame and fortune. There is always the chance of a conflict of interest arising in both clinical practice and clinical trials which often biases meta-analysis, protocols, editorials and review articles. Though conflicts of interest are not good or bad, problems do arise when a different motivation dominates the goal of benefiting the patient and producing the best possible knowledge, in addition to the inherent difficulties of searching for scientific truths. However, several strategies have been designed to resolve these problems: using scientific method and evidence-based medicine, developing suitable criteria for evaluating guidelines, promoting education, implementing clear policy designed to handle conflicts of interest and open discussions of these topics, aiming to protect the readers of scientific journals, leaving them free to draw their own conclusions. It is clear that we are all responsible for the reliability of scientific medical knowledge.

Keywords