Estudios Políticos (Jan 2011)
Understanding the contemporary United States and European Union foreign policy in the Middle East
Abstract
Los Estados Unidos, como el poder geopolítico dominante en el Medio Oriente, han estado luchando por estabilizar la región con el fin de alcanzar sus objetivos políticos y lograr sus intereses. Particularmente desde la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos ha priorizado, instituido y considerado las políticas del Medio Oriente como vitales para asegurar sus “intereses nacionales” hasta los ataques terroristas a las torres gemelas en la ciudad de Nueva York. Como es claro, los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 marcaron un cambio dramático, no solo en las políticas de Estados Unidos, sino también en la retórica estadounidense, así como en los discursos internacionales. Luego de los ataques terroristas, las políticas de Estados Unidos con relación al Medio Oriente pasaron de ser una cuestión de “seguridad nacional”, lo cual básicamente hacía más énfasis en “la seguridad defensiva”, a ser una cuestión de “seguridad preventiva de los intereses nacionales” principalmente bajo la administración neoconservadora de George W. Bush. Como consecuencia, Estados Unidos adelantó dos incursiones militares en Afganistán (2001) y en Iraq (2003) donde se puso en la tarea de cambiar unilateralmente y de manera sensible el régimen de dichos Estados con el objeto de asegurar sus intereses nacionales y procurar la paz mundial a largo plazo. Es importante resaltar aquí que Estados Unidos autorizó el completo apoyo (por lo menos retóricamente) a las Naciones Unidas para desarmar el régimen Talibán en Afganistán. Este estudio revisa y conceptualiza la política exterior actual de los Estados Unidos y la Unión Europea con respecto al Medio Oriente -aunque no son idénticas- antes y después de los ataques terroristas del 11 de septiembre. El argumento aquí presentado es que los objetivos de la política exterior con relación al Medio Oriente, tanto de los Estados Unidos como de la Unión Europea, giran principalmente alrededor de dos puntos: la seguridad del petróleo y la protección del Estado de Israel en una región predominantemente árabe. De manera similar, aunque no exactamente de la misma forma, tanto Estados Unidos como la Unión Europea tienen intereses en establecer buenas relaciones con los Estados árabes así como en promover la democracia y la economía del mercado libre en el Medio Oriente. Este estudio también revisa las iniciativas de política exterior con el Medio Oriente del presidente Barack Obama e intenta indicar algunos puntos clave.