Atención Primaria (Jul 2022)

Cribado e intervención breve en consumo de alcohol

  • Rodrigo Córdoba García,
  • Francisco Camarelles Guillem

Journal volume & issue
Vol. 54, no. 7
p. 102349

Abstract

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Resumen: La morbilidad asociada al consumo de alcohol incluye patología digestiva, psiquiátrica, neurológica, infecciosa, cáncer de diversos tipos, enfermedades cardiovasculares, lesiones intencionales, no intencionales, patología social y problemas familiares. Las evidencias más recientes no indican que el consumo «moderado» sea beneficioso para la salud. Por lo tanto, debe enfatizarse más bien la idea de evitar los consumos de riego y transmitir a los pacientes que lo más beneficioso para la salud sería no consumir alcohol o hacerlo en dosis de bajo riesgo. El instrumento más adecuado de cribado es el AUDIT-C. Las bases de la intervención breve consisten en estrategias cognitivo-conductuales y motivacionales. Hay que dar una información positiva sobre los beneficios de la moderación e informar sobre el peligro de la ingesta de alcohol. En fases precoces de la dependencia se contempla la oferta de tratamiento farmacológico de desintoxicación, deshabituación y seguimiento. Los casos más graves requieren coordinación con los servicios de adicciones. En España se ha podido comprobar que la intervención breve es efectiva y que disminuye el consumo 100 gramos de alcohol a la semana. Las estrategias comunitarias son el marco normativo adecuado para lograr los mejores resultados de la intervención breve. Estas deberán ir encaminadas a reducir la oferta y la disponibilidad para el consumo, mediante la adopción de medidas legislativas, de manera que se limite tanto la accesibilidad económica como la física. Por otra parte, habrá que implementar medidas para disminuir la demanda del alcohol mediante la educación para la salud a determinados grupos de riesgo. Abstract: Morbidity associated with alcohol consumption includes digestive, psychiatric, neurological, infectious disease, cancers of various types, cardiovascular disease, intentional injuries, unintentional injuries, social pathology, and family problems. The most recent evidence does not indicate that “moderate” consumption is beneficial to health. The most recent evidence indicates that “moderate” consumption is not beneficial to health. Therefore, the emphasis should be placed on avoiding risky drinking and advising patients that it would be in their best health interest to avoid alcohol or to drink alcohol at low-risk doses. The AUDIT-C is the most appropriate screening instrument. Cognitive-behavioural and motivational strategies form the basis of brief intervention. Positive information about the benefits of moderation and information about the dangers of alcohol intake should be given. In early stages of dependence, pharmacological treatment for detoxification, withdrawal and follow-up is considered. More serious cases require coordination with addiction services. In Spain, BI has proven effective and to reduce alcohol consumption by 100 g/week. Community strategies are the appropriate policy framework to achieve the best results from brief intervention. They should aim to reduce the supply and availability for consumption by adopting legislative measures to limit both economic and physical accessibility. Furthermore, measures should be implemented to reduce the demand for alcohol through health education for specific risk groups.

Keywords