Los comentarios negativos sobre el nivel ortográfico de los costarricenses es frecuente. La falta más común toca a la acentuación. Esto implica que las reglas ortográficas, aunque estudiadas desde la primaria, son insuficientes como herramienta que regule la ortografía. Por este motivo, tenemos una propuesta lúdica de práctica de la acentuación, llamada Horrografía, la cual no exige la repetición de las reglas.