Los labios formas un complejo mecanismo esfinteriano que participa en varias funciones: habla, alimentación, respiración, succión y deglución. Existen técnicas quirúrgicas modernas de reconstrucción, que conservan la anatomía y función del labio en forma parcial, sin conseguir los resultados funcionales y estéticos de excelencia. La radioterapia consigue éstos resultados con piel intacta e inervación muscular.