Dyna (Jan 2013)
DEL EDITOR. LA IMPORTANCIA DE LLAMARSE AFINIDAD QUÍMICA. PARTE II: LA SEMILLA GERMINA
Abstract
El concepto de afinidad química abre su desarrollo desde la protohistoria. Se alimenta del pensamiento creativo, liberándose de las creencias de la época y de posiciones de poder, nutriéndose del intercambio de ideas, absorbiendo conocimientos de Egipto y Babilonia. El pensamiento griego -representado por un grupo de jonios y atenienses- centrado en Aristóteles, lleva al inicio de la germinación del concepto de la afinidad química, con los conceptos de átomo, elemento y materia y con la noción de atracción y repulsión entre elementos, que es la precursora de la “afinidad”. Esta época, centrada en el conocimiento, pensamiento y sentido común de Aristóteles, fue la base del pensamiento occidental. La experimentación, la práctica, para responder a situaciones y necesidades que se presentaban, corrió a su ritmo desde la edad de bronce, pero independiente del desarrollo del pensamiento griego. Mediante ésta, se conocen y dominan aleaciones, procedimientos y sustancias, y se reconocen otros que intervienen o son subproductos de procesos y reacciones debidas a la afinidad química.