Nutrición Hospitalaria (Nov 2011)

Guidelines for specialized nutritional and metabolic support in the critically-ill patient: Update. Consensus SEMICYUC-SENPE: Cardiac patient Recomendaciones para el soporte nutricional y metabólico especializado del paciente crítico: Actualización. Consenso SEMICYUC-SENPE: Paciente cardíaco

  • F. J. Jiménez Jiménez,
  • M. Cervera Montes,
  • A. L. Blesa Malpica

Journal volume & issue
Vol. 26
pp. 76 – 80

Abstract

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Patients with cardiac disease can develop two types of malnutrition: cardiac cachexia, which appears in chronic congestive heart failure, and malnutrition due to the complications of cardiac surgery or any other type of surgery in patients with heart disease. Early enteral nutrition should be attempted if the oral route cannot be used. When cardiac function is severely compromised, enteral nutrition is feasible, but supplementation with parenteral nutrition is sometimes required. Sustained hyperglycemia in the first 24 hours in patients admitted for acute coronary syndrome, whether diabetic or not, is a poor prognostic factor for 30-day mortality. In critically-ill cardiac patients with stable hemodynamic failure, nutritional support of 20-25 kcal/kg/day is effective in maintaining adequate nutritional status. Protein intake should be 1.2-1.5 g/kg/day. Routine polymeric or high protein formulae should be used, according to the patient's prior nutritional status, with sodium and volume restriction according to the patient's clinical situation. The major energy source for myocytes is glutamine, through conversion to glutamate, which also protects the myocardial cell from ischemia in critical situations. Administration of 1 g/day of omega-3 (EPA+DHA) in the form of fish oil can prevent sudden death in the treatment of acute coronary syndrome and can also help to reduce hospital admission for cardiovascular events in patients with chronic heart failure.El paciente con patología cardíaca puede presentar 2 tipos de desnutrición: la caquexia cardíaca, que aparece en situaciones de insuficiencia cardíaca congestiva crónica, y una malnutrición secundaria a complicaciones de la cirugía cardíaca o de cualquier cirugía mayor realizada en pacientes con cardiopatía. Se debe intentar una nutrición enteral precoz si no se puede utilizar la vía oral. Cuando la función cardíaca esté profundamente comprometida la nutrición enteral es posible, pero a veces precisará suplementación con nutrición parenteral. La hiperglucemia aguda sostenida en las primeras 24 h en pacientes ingresados por síndrome coronario agudo, sean o no diabéticos, es un factor de mal pronóstico en términos de mortalidad a los 30 días. En el paciente crítico cardíaco con fallo hemodinámico en situación estable, un soporte nutricional de 20-25 kcal/kg/día es eficaz para mantener un estado nutricional adecuado. El aporte proteico debe ser de 1,2-1,5 g/kg/día. Se administrarán fórmulas poliméricas o hiperproteicas habituales, según la situación nutricional previa del paciente, con restricción de sodio y volumen según su situación clínica. La glutamina es la mayor fuente de energía para el miocito, vía conversión a glutamato, protegiendo además a la célula miocárdica de la isquemia en situaciones críticas. La administración de 1 g/día de ω-3 (EpA+DHA), en forma de aceite de pescado, puede prevenir la muerte súbita en el tratamiento del síndrome coronario agudo y también puede contribuir a una disminución de los ingresos hospitalarios, por eventos cardiovasculares, en la insuficiencia cardíaca crónica.

Keywords