Darwiniana (Jan 2014)

LAS COMUNIDADES VEGETALES DE LA SABANA DEL PARQUE NACIONAL EL PALMAR (ARGENTINA)

  • William B. Batista,
  • Andrés G. Rolhauser,
  • Fernando Biganzoli,
  • Silvia E. Burkart,
  • Liliana Goveto,
  • Aristóbulo Maranta,
  • A. Genoveva Pignataro,
  • Natalia S. Morandeira,
  • Mirta Rabadán

Journal volume & issue
Vol. 2, no. 1
pp. 5 – 38

Abstract

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El Parque Nacional El Palmar, Entre Ríos, preserva desde 1965 el mayor remanente de la sabana de Butia yatay , un ecosistema rico en especies amenazado por la actividad humana. Para estudiar el funcio - namiento de este ecosistema y gestionar su preservación, es necesario contar con una adecuada carac - terización de la heterogeneidad de su vegetación. En este trabajo presentamos una clasificación fitoso - ciológica de las comunidades vegetales de la sabana del Parque, describimos su estructura, composición y diversidad florística y detallamos su distribución en el paisaje. Con el fin de estratificar la obtención de datos, delimitamos primero las principales unidades geomorfológicas del paisaje. En la primavera de 1999 y en el verano siguiente, realizamos censos florísticos completos en 73 “stands” de sabana con diferentes historias de incendio, distribuidos en las diferentes unidades geomorfológicas. Utilizamos técnicas de análisis multivariado y clasificación numérica para agrupar los censos en comunidades y las especies en grupos florísticos. Finalmente, resumimos las diferencias entre las comunidades en un esca - lamiento multidimensional métrico. Obtuvimos 7 comunidades, descriptas por 20 grupos florísticos. El patrón de similitudes entre estas comunidades sugiere que la heterogeneidad florística se ordena según dos componentes, uno asociado con diferencias en la textura del suelo y el otro con diferencias en el régimen de humedad del suelo. Tres de las comunidades, afines entre sí, se distribuyen en las terrazas altas e interfluvios que conforman la matriz del paisaje, en correspondencia con diferencias graduales de topografía y suelos. Estas comunidades cambian sucesionalmente por el avance de la lignificación des - encadenada por la exclusión del ganado y mantenida por la escasez de incendios naturales. Las restantes cuatro comunidades aparecen estrictamente asociadas con afloramientos rocosos, depósitos arenosos o vías de escurrimiento que interrumpen la matriz del paisaje; en ellas no es evidente la lignificación.