Revista Alergia México (Jun 2018)
Miositis eosinofílica, parte del espectro del síndrome hipereosinofílico o diagnóstico diferencial. Reporte de un caso
Abstract
Antecedentes: El eosinófilo bajo condiciones normales representa 1 a 5 % de los leucocitos en sangre periférica. La esosinofilia es definida como un incremento absoluto del conteo de eosinófilos en sangre periférica: leve, 500 a 1500 células/μL; moderada, 1500 a 5000 células/μL; severa, > 5000 células/μL. Las causas son variadas y requieren un enfoque sistemático para elegir el mejor tratamiento. Las principales causas de hipereosinofilia son hipersensibilidad a medicamentos, desórdenes alérgicos (dermatitis atópica, rinitis, asma), inmunodeficiencias, vasculitis (granulomatosis eosinofílica con poliangeítis), infección parasitaria (principalmente estrongiloidiasis y escabiosis), infecciones virales (VIH), infecciones fúngicas (aspergilosis), neoplasias (tumores sólidos, hematológicas), síndrome hipereosinofílico, enfermedades IgG4 relacionadas, artritis reumatoide, lupus eritematoso sistémico, síndrome de Sjögren y miositis eosinofílica, entre otras. Objetivo: Describir un caso de miositis eosinofílica en hombre en quien se realizó estudio completo para hipereosinofilia. Reporte de caso: Hombre de 32 años de edad con historia desde la adolescencia de edema súbito de antebrazo derecho que cedió espontáneamente; dos meses después de la primera manifestación reapareció en las dos extremidades, indoloro, sin respuesta a los analgésicos, resolución espontanea; tres meses después presentó el mismo cuadro en brazos y piernas. En el año siguiente, aparición de lesiones similares en el cuerpo acompañadas de dolor, malestar, fiebre, nódulos linfáticos inguinales aumentados, oliguria, polidipsia y erupciones eritematosos en tronco y extremidades superiores e inferiores. Fue hospitalizado, se detectó eosinofilia y se realizaron estudios básicos y tratamiento con esteroides, con el que mostró mejoría clínica. Un mes después presentó cuadro similar, por lo que se indicó biopsia de piel y músculo. Por diagnóstico de miositis eosinofílica se inició estudio periódico por hematología para vigilancia de aparición de neoplasia hematológica, que hasta el momento es negativa. El paciente se encuentra en espera de definir otras opciones terapéuticas como la administración de fármacos biológicos tipo anticuerpos monoclonales anti-IL-5. Conclusiones: La miositis eosinofílica es una enfermedad rara que debe considerarse en el diagnóstico diferencial de la hipereosinofilia periférica.