Salud Pública de México (Apr 2002)
Con quién hablan los adolescentes mexicanos sobre el SIDA With whom do Mexican teenagers talk about AIDS?
Abstract
Objetivo. Establecer si ciertas características de los jóvenes influyen en la elección de las personas con quienes hablan sobre el SIDA. Material y métodos. A partir de una encuesta realizada por el Consejo Nacional para la Prevención y Control del SIDA (CONASIDA) en 1997 se hizo una regresión logística multinomial. El estudio abarca a 4 886 jóvenes de uno u otro sexo, de 15 a 19 años, en 13 entidades federativas de México. Resultados. El modelo, que incluye las variables sexo, actividad sexual, condición de actividad laboral y escolaridad del padre resultó significativo y altamente predictor de las personas con quienes los jóvenes hablan del SIDA, siempre en comparación con los jóvenes que no hablan con nadie. Los hombres jóvenes hablan del SIDA con su padre más que las mujeres, y las mujeres más con su madre. Los sexualmente activos hablan más con los amigos, y algo menos con los maestros, que los sexualmente inactivos. A mayor escolaridad del padre, los jóvenes tienen más interlocutores y hablan más sobre el SIDA en el ámbito familiar, comparados con los que tienen padre sin escolaridad. Conclusiones. Se sugiere diseñar estrategias diferenciadas de educación en salud sexual de acuerdo con las características de las subpoblaciones.Objective. To establish whether certain characteristics of the young influence their choice of people with whom to discuss AIDS. Material and Methods. A national survey was conducted in 1997 by the Consejo Nacional para la Prevención y Control del SIDA (CONASIDA, Mexican Council for AIDS Prevention and Control). Study subjects were 4886 male and female 15-19 year-old teenagers. Multinomial logistic regression was used to analyze data. Results. A model including the variables sex, sexual activity, work conditions, and father's schooling level, turned out to be significant and highly predictive of people with whom teenagers discuss AIDS, as compared to teenagers speaking with no one. Male teenagers discuss AIDS with their fathers more than female teenagers, and female teenagers discuss AIDS more with their mothers. Sexually active teenagers discuss AIDS more with their friends and less with their teachers than sexually inactive teenagers. The greater schooling level the father has, the more people teenagers have with whom to discuss AIDS and the more they discuss AIDS at home, compared to teenagers with fathers without schooling. Conclusions. Differentiated sexual education training strategies should be designed in accordance with subpopulations' characteristics.