Ciencia & Salud (Feb 2022)

Neurofisiología del dolor.

  • María Jesús Solano Guillén,
  • Gerardo Villalobos Zúñiga

DOI
https://doi.org/10.34192/cienciaysalud.v6i1.379
Journal volume & issue
Vol. 6, no. 1

Abstract

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La Asociación Internacional para el Estudio del Dolor, define el dolor como una experiencia sensorial y emocional desagradable, asociada a un daño tisular real o potencial. A nivel mundial es considerado un problema de salud pública importante, siendo una de las principales causas de atención médica en los centros de salud tanto públicos como privados. Además repercute directamente sobre la calidad de vida de la persona que lo padece, principalmente en los ámbitos laboral, social y económico. El dolor desempeña una función biológica actuando como mecanismo de defensa del organismo. Se estima que aproximadamente un 60% de la población ha presentado dolor al menos una vez en su vida. El dolor puede categorizarse según distintos criterios de acuerdo a las características que presente dentro de las que destacan; el tiempo de duración clasificándolo en agudo o crónico, fisiopatológicamente en nociceptivo o neuropático y por localización en somático o visceral. El proceso neuronal del dolor tiene una alta complejidad y va a depender según cada individuo. Además es fundamental la participación de nocireceptores, que son los receptores encargados de transmitir el estímulo doloroso hasta la médula espinal, posteriormente al tálamo y finalmente al sistema nervioso central, específicamente a la corteza somatosensorial. Existen cuatro fenómenos que participan en el proceso nociceptivo los cuales son: transducción, transmisión, modulación y percepción. Para el manejo del dolor existen diferentes opciones terapéuticas que se pueden dividir en farmacológicas y no farmacológicas. La estrategia no farmacológica de mayor relevancia es la fisioterapia, mientras que las medidas farmacológicas están basadas en la escala analgésica de la OMS.

Keywords