Acta Neurológica Colombiana (Dec 2023)
Enemigos del silencio
Abstract
La capacidad de escuchar los sonidos surgió temprano en la evolución biológica como una herramienta de supervivencia que permitía detectar peligros inminentes, como la presencia de un predador acechante o de un objeto que se desploma. También ayudó a esos primeros carnívoros a detectar posibles presas, y sirvió sin duda en la comunicación entre miembros de una misma especie, ya fuera para ahuyentar con un rugido a un rival o para atraer con el canto (o con la voz) a una potencial pareja. Ya entre los homínidos, el oído fue un componente esencial para el desarrollo del lenguaje y por ende de la civilización. Su función en el deleite humano, en particular, pero no exclusivamente a través de la música, es innegable. Mucho ha cambiado en el entorno sonoro desde aquellos remotos tiempos cuando los primeros primates pensantes recorrieron las sabanas africanas. Hoy, los seres humanos, en especial en los entornos urbanos, viven expuestos a múltiples fuentes sonoras, la mayor parte de ellas en la categoría de ruido, de contaminación sonora, de sonidos no deseados, de ruido antropogénico.
Keywords