Revista Alergia México (Jun 2018)
Anafilaxia perioperatoria. Reporte de un caso y revisión de la literatura
Abstract
Antecedentes: La anafilaxia perioperatoria es una condición que amenaza la vida, con una prevalencia estimada de 1:3.500 a 1:20.000 procedimientos y una tasa de mortalidad de hasta 9 %. Se presenta principalmente durante la inducción anestésica. Los principales agentes implicados son los relajantes musculares en 60 a 70 % de los casos. Otros agentes implicados son los antibióticos y el látex. Objetivos: Describir el caso de una mujer que presentó anafilaxia perioperatoria. Reporte de caso: Mujer de 48 años remitida por anestesiología con diagnóstico de anafilaxia perioperatoria, la cual impidió realizar procedimiento quirúrgico. En la historia clínica se registró hipotensión severa sostenida sin respuesta a etilefrina, angioedema bipalpebral/labios y máculas eritematosas cutáneas, sin hipoxemia. Recibió hidrocortisona y líquidos endovenosos, con mejoría. Los medicamentos utilizados durante la inducción, según reporte de anestesia fueron dipirona, cefalotina, lidocaína y “otros anestésicos” (no especificados). Por ausencia parcial de datos de medicamentos utilizados durante el procedimiento y teniendo en cuenta los principales implicados en este tipo de reacciones, se decidió realizar estudios completos, obteniendo resultados positivos para prueba intradérmica con cefazolina (2 mg/mL), succinilcolina (100 μg/mL) y vecuronio (400 μg/mL) e indeterminado para cisatracurio (20 μg/mL). Conclusiones: La evaluación de estos pacientes debe iniciar con una profunda investigación del reporte anestésico que incluya los detalles y el tiempo en que se administró cada medicamento y cuánto transcurrió hasta el inicio de la reacción. En el momento de realizar las pruebas cutáneas con los relajantes musculares se deben probar todos los descritos por su alta reactividad cruzada, la cual es aproximadamente de 65 % (demostrada en pruebas cutáneas) y 80 % (demostrada por pruebas de inhibición de inmunoensayo) y poder ofrecer al paciente una opción segura a futuro. Otro aspecto importante que nos llevó a publicar el caso fue la presencia de pruebas cutáneas positivas tanto a relajantes musculares como a antibióticos (cefazolina), lo que llevó a pensar en un síndrome de hipersensibilidad a múltiples medicamentos, definido como alergia a dos o más medicamentos de grupos químicos diferentes; aunque no muy común debe tenerse presente en el momento de analizar los resultados de las pruebas cutáneas para evaluar la relevancia clínica y evitar restricciones innecesarias que puedan perjudicar al paciente.