Revista Espanola de Enfermedades Digestivas (Aug 2007)
Avances en el tratamiento farmacológico de la hemorragia digestiva de origen oscuro Update on medical therapy for obscure gastrointestinal hemorrhage
Abstract
El desarrollo de la cápsula endoscópica y la enteroscopia de doble balón ha aumentado las tasas de diagnóstico y tratamiento en la hemorragia digestiva de origen oscuro, en la que las angiodisplasias del intestino delgado son la causa más frecuente. Sin embargo, el 25-40% de los pacientes, no subsidiarios o no respondedores a la terapéutica endoscópica, angiográfica o quirúrgica, pueden tener alto riesgo de resangrado y carecen de tratamiento médico claramente eficaz. La utilidad de la terapia hormonal está cuestionada actualmente, sin olvidar los frecuentes y limitantes efectos secundarios. El octreótido suele ser eficaz en el control de la hemorragia pero no parece la terapia de mantenimiento más óptima. Los beta-bloqueantes no selectivos, de igual manera que en la profilaxis de la hemorragia por hipertensión portal, pueden ser útiles en combinación con otros fármacos. Recientemente, el octreotido LAR, una formulación de liberación retardada que se administra una vez al mes por vía intramuscular, y la talidomida oral, un potente inhibidor de la angiogénesis, han demostrado su eficacia y seguridad a largo plazo en casos graves aislados.The development of capsule endoscopy and double-balloon enteroscopy has increased diagnostic and therapeutic rates in obscure gastrointestinal hemorrhage, where angiodysplasia of the small bowel is the most frequent cause. Nevertheless, almost 25-40% of patients who are not candidates or do not respond to endoscopic, angiographic, or surgical management may be at high risk of rebleeding, and therefore lack a clearly effective medical therapy. The utility of hormonal therapy remains unclear and is burdened by adverse effects. Subcutaneous octreotide usually controls bleeding but does not seem adequate for mainteinance therapy. Non-selective beta-blockers alone or in combination with other treatments, as in the prophylaxis of portal hypertension variceal bleeding, may be helpful. Recently, octreotide LAR, a depot formulation administered once a month intramuscularly, and oral thalidomide, a powerful inhibitor of angiogenesis, have demonstrated their effectiveness and safety for long-term therapy in anecdotal case reports and deserve further investigation.