Escritos (Nov 2021)
La exhortación a la vida filosófica en el diálogo de san Agustín Contra Académicos
Abstract
Este artículo tuvo por objetivo tratar el llamado agustiniano a la vida filosófica. En discusión con el escepticismo académico, san Agustín exhorta a su amigo Romaniano a la búsqueda de la sabiduría y, para ello, a desestimar igualmente la desconfianza y la confianza excesiva en la razón, pues argumenta tanto contra la postura escéptica, o desesperación de encontrar la verdad, como el dogmatismo o la seguridad de haber encontrado definitivamente la verdad. De hecho, san Agustín señala la dificultad de dar por cierto un conocimiento y, por ello, no descarta el escepticismo, sino que lo incorpora como la fase inicial del conocer y como antídoto contra la ingenuidad de dar a la facultad humana de conocer humano un alcance absoluto. En la perspectiva de este equilibrio, san Agustín exhorta a Romaniano a terminar de decidirse por llevar una vida filosófica. Para recorrer este camino, en continuidad con sus lecturas neoplatónicas, considera la belleza como guía: se accede a la belleza espiritual transitando por la cósmica; el alma que contempla, en tanto se corresponde con lo contemplado, puede alcanzar así el camino ascensional de su propia transformación. El método de acceso a los textos es filológico, es decir, que busca al mismo tiempo descifrar la letra de la trama filosófica y establecer una comprensión contextual de aquella. Un método de esta naturaleza es inseparable del marco conceptual; en efecto, la formación de un saber filosófico, que intenta encontrar los límites de la comprensión de la revelación, pone en tensión de perfección a la persona, es decir, la guía hacia su propia trascendencia.