Poligramas (Jun 2017)
Trad. Control de goces y fascismo soft
Abstract
Desde los surrealistas, por lo menos, somos todos hijos de Sade. Nuestro mundo es finalmente aquel del goce obligatorio y de la revolución permanente. Se responde a una ley ella misma tan perversa que en vez de prohibir, obliga a gozar. El capitalismo no tiene el Goce como fin, ni tampoco la Revolución. Y su manera de conjurarlo es a través de los goces fantasmales y consumistas a cualquier precio. Nos hallamos en la revolución de los goces infinitos, en el sentido de un círculo vicioso, y en la crisis permanente en lugar de la revolución permanente. En este artículo, que es una reflexión sobre el fascismo soft, se analiza el término lacaniano “Goce” a partir de la literatura y la filosofía.
Keywords