Espacio, Tiempo y Forma. Serie III, Historia Medieval (Jan 1994)
Documentos y escribanía del Cabildo catedralicia de Burgos (siglo XIII)
Abstract
Frágil es la memoria humana y por ello la necesidad de fijar por escrito los hechos. Resulta incuestionable que ios testimonios escritos sirven para dejar constancia de lo acontecido. No de todo, pero sí de aquéllo de lo que se quería, o se debía, dejar prueba. Es cierto que el paso del tiempo ha influido en la merma de las fuentes escritas del pasado, a veces por descuido o dejadez, en ocasiones intencionadamente. Pero, si alguna institución se ha caracterizado, en general, por el celo en la conservación de su memoria histórica ha sido, principalmente, la eclesiástica. Monasterios y catedrales constituyen un buen ejemplo de ello, ya que desde muy temprano tuvieron conciencia de su importancia y de la necesidad de su guarda. Además, durante siglos fueron casi los únicos en tener capacidad escritoria y, por consiguiente, recaía en ellos la responsabilidad de plasmar por escrito las obligaciones y acuerdos establecidos por la gran mayoría de la población, incluidos los reyes. Contaban, igualmente, con un punto de referencia básico, los documentos procedentes de la cancillería pontificia así como con las diferentes reglas y disposiciones que ponían el acento en la escritura y en la escrituración.