Revista de Historia Moderna (Oct 2015)
Puedo hacer de una plumada cuantos duques quiera pero ni un solo Rubens. Un artista diplomático al servicio de la Casa de Austria
Abstract
En el turbulento periodo de la Guerra de los Treinta Años la diplomacia fue un elemento clave. El estudio de las Relaciones Internacionales siempre ha estado vinculado a grandes nombres pertenecientes a la élite social e intelectual. Algunos motivos por los cuales eran designados para tan importantes misiones eran su formación y su desenvoltura en un ambiente hostil como era la Corte de un Príncipe. El presente estudio está centrado en un personaje, Pedro Pablo Rubens, que si bien no es el prototipo de embajador, desarrolló un papel crucial en el escenario político europeo. La historiografía no ha pasado por alto esta faceta de Pedro Pablo Rubens aunque ciertamente lo ha hecho de una forma somera. No pretendemos aquí analizar profundamente la figura del pintor diplomático sino realizar un esbozo desde un punto de vista más actual, empleando fuentes de archivo, impresas y bibliografía complementaria que nos ayuden no sólo a exponer el desarrollo de los acontecimientos sino a investigar las circunstancias en las que realizó su labor, los motivos que le llevaron a ello y el papel que en todo ello jugó su personalidad.